Los síntomas más frecuentes incluyen:

• Bulto visible o palpable en la ingle, que aumenta al toser, pararse o cargar peso.
• Dolor o ardor en la ingle.
• Pesadez o molestia al final del día.
• En hombres, sensación de «bulto que baja hacia el testículo».
• En casos graves, náuseas o vómitos (signo de complicación).

Importante: una hernia inguinal no se cura sola. Solo la cirugía puede corregirla de forma definitiva.

La cirugía de hernia inguinal puede realizarse por vía laparoscópica o por técnica abierta, dependiendo del caso. En ambos procedimientos:

 ✅ Se reintroduce el contenido abdominal a su lugar.
 ✅ Se refuerza la zona con una malla quirúrgica.
 ✅ Se evita el riesgo de recurrencia o estrangulación.

Postergar la cirugía puede llevar a:

❌ Aumento progresivo del tamaño de la hernia.
❌ Dolor crónico.
❌ Atrapamiento o estrangulación del intestino.
❌ Urgencias quirúrgicas peligrosas.

Operar una hernia en forma programada es más seguro, rápido y económico que hacerlo en emergencia.

 Procedimiento ambulatorio o corta hospitalización.

 Regreso rápido a tus actividades.

 Dolor postoperatorio mínimo.

 Técnica moderna con bajo riesgo de complicaciones.

Discreción y excelente resultado estético.

• Deambulación el mismo día.
• Reposo relativo durante 5 a 7 días.
• Retorno progresivo a ejercicios físicos.
• Cuidado de la herida sencillo.
• Seguimiento personalizado.

Nuestro equipo quirúrgico se asegura de acompañarte en todo el proceso, antes y después de la operación.

  Experiencia en más de 1,000 cirugías de hernia.
  Mallas de alta calidad incluidas en el paquete.
  Tecnología moderna y mínima invasión.
  Atención integral: consulta, exámenes, cirugía y control.
  Paquetes todo incluido, con precios accesibles y sin sorpresas.